En uno de los aterrizajes de campaña, el Sr. Rajoy, en referencia a la voluntad del sentir independentista en el pueblo vasco, dijo que “lo pequeño es la nada”. Siempre he oído, así me lo han transmitido y así lo siento, que “lo pequeño es hermoso”, “txikia ederra da” y este pequeño pueblo vasco, por muchas razones históricas, culturales, políticas y sociales, es hermoso, “gure herria ederra da”.

El mismo día que Rajoy despreciaba de tal manera a este Pueblo y su voluntad independentista, The Economist publicaba un artículo bajo el titulo: “The Economist ve a España en dirección a una espiral de muerte al estilo griego” y el New York Times editorializaba señalando que “los recortes traerán más miseria a España”.  Resulta que viene a pregonar a Euskadi con ese desprecio hacia lógicas y legitimas aspiraciones de los vascos, mientras tiene a su país sumido en una situación de emergencia, a la que esta siendo incapaz de hacer frente.

Este pueblo, pequeño, que tampoco es ajeno a la crisis y sus negativas consecuencias, tiene la mitad de desempleo del que tiene España, la contribución del sector industrial al PIB es del 24,5%, la de España  diez (10) puntos menos y la de Alemania es similar a la de Euskadi, Euskadi (datos 2011) tiene un PIB nominal por habitante de 31.288 euros, un 34,55% superior al de la media nacional de España y un 24,4% superior al de la media europea de los 27 estados. Estos son algunos datos que refrendan el diferencial de Euskadi en relación a otros entornos económicos y en definitiva descalifican lo dicho por Rajoy respecto a que “lo pequeño es la nada”.

Esto es lo que nos ofrecen en campaña electoral los partidos españolistas, su obsesión por desacreditar todo lo que suene a vasco, centrando todos sus esfuerzos en españolizar a este pueblo, recurriendo sin estupor a sembrar el miedo, mediante el engaño hacia los mas débiles, lo estamos viviendo a diario con los pensionistas, los desempleados, los jóvenes…, pero incapaces de desarrollar política publica alguna capaz de sacar de la crisis a su querida España.

Como señala Alain Touraine, “frente a la crisis, Europa solamente muestra impotencia económica, política y cultural pero esa impotencia no es consecuencia de la crisis, es su causa general”; a España le pasa lo mismo, sufre de impotencia, impotencia económica, política y cultural y se enrabieta cuando ve en su entorno como pueblos y países pequeños, como Euskadi, somos diferentes, ni mejores, ni peores, pero si diferentes y no por pequeños peores.

 MUGARRILUZE

Laudio